Aumento de precios y escasez de oferta: el difícil panorama para los inquilinos

El mercado inmobiliario continúa experimentando los efectos de la Ley de alquileres en Argentina. Los valores de los nuevos contratos han alcanzado niveles históricos, mientras que la disponibilidad de unidades para alquilar sigue en picada. A medida que el oficialismo se debate entre suspender o derogar la legislación, el futuro del sector se mantiene incierto.

De acuerdo a un relevamiento realizado por Reporte Inmobiliario, en el último año los valores para los nuevos contratos han sufrido un aumento del 160%. Por otro lado, la disponibilidad de inmuebles para alquilar ha disminuido en un 63% en el mismo período.

La cantidad de departamentos de 1 a 4 ambientes usados disponibles para alquilar en marzo de este año fue de 1.098 unidades, un 7,3% inferior a febrero, cuando se ofertaban 1.181. La cifra es un 63,1% menor a la que hallaban los buscadores de alquileres en el mismo período del año pasado.

La consultora también advierte que este fuerte aumento en los precios es un fenómeno que no tiene precedentes, y que los valores de los alquileres se han acelerado en los últimos meses, superando holgadamente el índice de inflación general en cada mes del año.

El precio promedio de un monoambiente en Argentina ya es del orden de los 95.000 pesos sin expensas, mientras que la cotización de los departamentos de dos ambientes alcanza los 100.000 pesos. Las cotizaciones de los departamentos de dos dormitorios que se ofrecían en alquiler en febrero pasado registraron un valor medio de 152.500 pesos, mientras que aquellas unidades con 3 dormitorios ya se ubican en los 210.000 pesos.

La imposición legal de mantener congelado el precio del alquiler durante un año con inflaciones que superan el 100%, entre otras variables, desalienta la oferta formal de alquiler tradicional, traduciéndose en cada vez menos viviendas disponibles. El número reducido de las que salen al mercado lo hacen con un valor inicial cada vez más elevado.

En resumen, la Ley de alquileres sigue siendo un tema controvertido que genera incertidumbre en el mercado inmobiliario. La suba en los precios de los alquileres y la escasez de oferta son dos de los principales problemas que afectan a los inquilinos, y la falta de definición del oficialismo sobre el futuro de la legislación no hace más que profundizar la situación.