Investigación submarina en la Fosa de Atacama

Modernos sensores submarinos investigan procesos geodésicos, biológicos y oceanográficos frente a la costa norte de Chile.

Ayer, se anunció la instalación de 4 sensores que integrarán el Sistema de Observación del Océano Profundo para la investigación en geociencias en la Fosa de Atacama. La instalación de estos sensores estuvo a cargo del Instituto Milenio de Oceanografía (IMO) y se realizó con la colaboración del buque de investigación alemán «Sonne». La tecnología submarina permitirá investigar procesos geodésicos, biológicos y oceanográficos en la Fosa de Atacama, en el norte de Chile. Además, esta tecnología permitirá una observación más precisa y cercana de los procesos biológicos y oceanográficos, así como de los constantes movimientos y choques entre las placas de Nazca y la Sudamericana, causantes de terremotos y tsunamis que afectan a Chile y el Pacífico Sur. El Observatorio del Océano Profundo, Terremotos y Tsunamis, forma parte del proyecto IDOOS (Integrated Deep-Ocean Observing System for geoscience research), que fue adjudicado en el marco del I Concurso de Equipamiento Científico y Tecnológico Mayor FONDEQUIP. La expedición llamada «SO297 Pisagua» partió de Talcahuano (Chile) a finales de febrero y culminó el 11 de abril, con el arribo del SONNE al puerto de Guayaquil (Ecuador). El académico de la Universidad de Antofagasta, Marcelo E. Oliva, informó que los sensores instalados se posicionaron aproximadamente a 50 kilómetros al norte de Taltal y a una profundidad que varía entre los 1.600 a los 5.500 m de profundidad en la Fosa de Atacama.