Del ‘tsunami’ de extrema derecha a la extinción del centroizquierda: las claves de las elecciones de constituyentes en Chile

Los comicios para elegir a quienes redactarán una nueva Constitución han dado la vuelta al tablero político del país sudamericano.

Un grupo de personas se reúne en la sede electoral del Partido Republicano, a la espera de resultados de los comicios para el Consejo Constitucional, en Santiago de Chile, este domingo.

Los resultados de la elección del Consejo Constitucional, que deberá redactar una nueva ley fundamental que será plebiscitada en diciembre, han dado la vuelta al tablero político chileno. Es la primera elección con inscripción automática y voto obligatorio desde el retorno a la democracia en 1990 y los votantes han apostado por una nueva fuerza política, la extrema derecha del Partido Republicano, liderado por José Antonio Kast.

Es el segundo intento del país sudamericano por cambiar la Constitución de 1980, tras el contundente triunfo de los que rechazaron, con un 62%, la anterior propuesta en septiembre del año pasado. Con el 99% de los votos escrutados, la gran sorpresa ha sido el arrastre de los republicanos, la participación sobre el 80% y la gran cantidad de votos nulos, que alcanzaron el 16,9% (en el referéndum del proyecto constituyente pasado, representaron un 1,64%). Si se suman los nulos y los blancos, se alcanza un histórico 21,49%, un porcentaje inusualmente alto en las elecciones chilenas. Son 2,7 millones de votos, más que los recogidos por cualquier partido, excepto los republicanos.

 

El ‘tsunami’ de la extrema derecha

El Partido Republicano, de extrema derecha, que nunca ha querido cambiar la Constitución, se hace con el dominio del Consejo Constituyente con un 35,48% de los votos, lo que lo dejaría con 23 de los 51 escaños. Aunque se proyectaba un buen desempeño en esta elección —en la línea del resultado del plebiscito de septiembre y las demandas de mayor seguridad del electorado—, la sorpresa fue la distancia amplia que esta formación sacó a las otras cuatro fuerzas políticas que presentaban candidatos.

El partido fundado en 2019 ha extendido su influencia velozmente con un discurso basado en el orden, el control de la inmigración y la economía. Kast fue el candidato más votado en la primera vuelta presidencial de 2021, pero Gabriel Boric lo derrotó en la segunda. Entre los elementos que han empujado a este movimiento figura el cambio del sistema electoral binominal a uno proporcional en 2017 y la moderación de la derecha tradicional, que ha intentado sacudirse la herencia de la dictadura de Augusto Pinochet.

Los republicanos no firmaron el acuerdo por un segundo intento de redactar una nueva ley fundamental en diciembre de 2022, por lo que no está claro lo que harán en el nuevo Consejo. Defienden la Constitución actual, marcada por un papel subsidiario del Estado.